La banda de pulsaciones más cómoda del mundo - Sportlife
A diferencia de las bandas de pulsaciones clásicas, ésta no la llevas en el pecho sino en el brazo o en el antebrazo, esa es la primera clave del sensor Polar Verity...
A diferencia de las bandas de pulsaciones clásicas, ésta no la llevas en el pecho sino en el brazo o en el antebrazo, esa es la primera clave del sensor Polar Verity Sense
17 de agosto de 2023 (07:40 CET)

No hace tanto tiempo si querías conocer tu frecuencia cardiaca haciendo deporte la única opción era sincronizar el reloj con una banda de pulsaciones que llevabas en el pecho. La medición electrocardiográfica de una banda, que detecta la actividad eléctrica que se produce en tu corazón con cada latido, es la forma más precisa de averiguar tus pulsaciones, el mismo sistema que usan los cardiólogos aunque en su caso con más electrodos.
Muchos deportistas se cansaron de la dictadura de la banda de pecho, las marcas tomaron nota y empezaron a surgir relojes que integraban la medición del pulso en la muñeca, con una tecnología totalmente diferente. En lugar de captar la actividad eléctrica del corazón lo que veían, nunca mejor dicho, era el flujo sanguíneo enviando señales luminosas hacia el interior de la piel. Cuando estas señales se interrumpían era porque pasaba sangre por los capilares y la tecnología óptica permitía contabilizar una pulsación con cada interrupción de flujo. El sistema era más cómodo que las bandas, porque al fin y al cabo no añadía un dispositivo extra, pero la precisión de los sistemas ópticos no es tan buena como la de las bandas, ya que el reloj en la muñeca se puede mover al bracear y la piel puede tener más o menos pigmentación que afecta a la lectura.
Polar llegó más lejos que nadie con su tecnología Precision Prime en la lectura de pulsaciones en la muñeca, incorporando diez LEDS con diferentes colores para mayor o menor profundidad de penetración de la luz, con electrodos de contacto y tomando en cuenta los datos de su acelerómetro para saber cuándo los cambios de lectura se debían al movimiento en vez de a una variación de pulsaciones. Su sistema de muñeca es el más elaborado del mercado pero aún así, su sensor Verity Sense mejora la fiabilidad de los datos de frecuencia cardiaca en condiciones complicadas de más movimiento.
No pesa nada pero vale por tres
El conjunto pesa apenas 19 gramos, solo 5 gramos del propio sensor más 14 g del soporte con la banda elástica de sujeción. Con ese peso resulta imperceptible y se coloca en una zona que no molesta lo más mínimo, sobre el bíceps, en el brazo o bien sobre el antebrazo.
Tomad nota, su batería le da para 30 horas de autonomía y se carga con un pequeño adaptador en cualquier entrada USB, su memoria interna puede archivar hasta 600 horas de entrenamiento y su alcance llega a los 150 metros de distancia.
Polar Verity Sense cuenta con tres modos:
1. Emisor de pulsaciones: Funciona igual que una banda de pecho convencional, capta la frecuencia cardiaca y la envía al dispositivo que quieras, bien tu propio reloj GPS, un ciclocomputador en el manillar o tu smartphone con una aplicación de entrenamiento, como puede ser Polar Beat que la tienes tanto para Android como para iOS. Su alcance es de nada menos que 150 metros así que es ideal para entrenadores que pueden controlar a sus deportistas desde un lateral de la pista o desde la grada mientras ellos entrenan o compiten en el campo de juego o la pista de atletismo.
2. Sensor de natación en piscina: Te lo pones en la banda de las gafas, con el adaptador incluido, y Verity Sense registra tus pulsaciones con total precisión, la distancia que has nadado y el ritmo al que lo has hecho, siempre que hagas largos en una piscina porque contabiliza las vueltas (haciendo volteo o simplemente tocando la pared) para calcular la distancia. En aguas abiertas solo registra las pulsaciones.

3. Memoria interna: Sin necesidad de reloj ni otro dispositivo, con el sensor guardas tus pulsaciones para luego volcarlas en Polar Flow y ver la intensidad de tu entrenamiento. La forma más sencilla de registrar tus sesiones con un dispositivo realmente minimalista y preciso.

Otro dato interesante de este potente mini sensor es su conectividad, ya que puede enviar la señal a dos dispositivos Bluetooth Smart simultáneamente y a dispositivos ANT+ ilimitados.
Del Polar Verity Sense nos ha gustado mucho su tamaño compacto, su buen funcionamiento, su ligereza y su conectividad. Cabe en cualquier sitio y se recarga, a diferencia de las bandas de pecho que usan pilas desechables. Ya tiene un sitio privilegiado en nuestro armario de las cosas que apreciamos y usamos a diario.